Increíblemente, aunque nos ocupamos de este problema hace ya cinco años, sigue siendo actualidad: los usuarios de iCloud siguen recibiendo invitaciones a eventos, a través del calendario, que son spam.
Ya en 2016 publicábamos crónicas como “Apple activa un sistema antispam para los calendarios en iCloud.com” o “Apple está investigando el spam en calendarios y busca una solución“, ambas de Diciembre de 2016.
Ya en Noviembre de 2016, mi socio y co-fundador de faq-mac, Carlos Burges, explicaba por qué podría proliferar este tipo de invitaciones no deseadas en el calendario, y se quejaba de que las soluciones no eran nada fáciles de implementar, si es que serv´ñian para algo.
Cinco años después, aparentemente, seguimos igual.
En 2016, Apple dijo que estaba “trabajando activamente para abordar este problema” mediante “la forma de identificar y bloquear remitentes sospechosos”. Las víctimas son atacadas de varias maneras. El método más común es recibir una invitación normal al calendario de iCloud a través de su aplicación de calendario.
Interactuar con la invitación, incluyendo rechazar, aceptar o elegir “Tal vez”, le permite al spammer saber que el correo electrónico es válido, para que pueda seguir siendo segmentado.
Desde entonces, Apple no ha comentado públicamente qué medidas específicas ha tomado para solucionar el problema, pero a través de un vídeo publicado por el Soporte de Apple, que hasta ahora ha obtenido más de 97.000 visitas, tiene una solución.
La solución es sencilla, según Apple: tienes que desuscribirte del calendario donde recibes el spam. Eso no impedirá que tu cuenta de correo vuelva a ser suscrita a otro calendario lleno de spam, pero simplifica la eliminación de los eventos.
Probablemente la forma más sencilla sería incluir un aviso antes de que aparezca el calendario solicitando aprobación específica del titular de la cuenta.
Sinceramente, a nosotros hace mucho que no nos sucede, y seguimos viviendo una vida tranquila en los pastos de Apple, pero está bien saber que este problema no se ha eliminado, sólo que hemos tenido suerte.
